Las anginas o amígdalas son ganglios linfáticos que se encuentran ubicados en la parte de arriba de la garganta y su función es eliminar las bacterias para impedir infecciones en el organismo.
Cuando se padece de amígdalas inflamadas a causa de una infección viral o bacteriana a este problema se le llama amigdalitis.
La amigdalitis es una de las enfermedades más comunes en niños y puede ir acompañada de los siguientes síntomas:
Durante la consulta el médico revisará la boca y la garganta, de estar inflamadas las amígdalas, estarán enrojecidas y con manchas blancas, los ganglios linfáticos de cuello y mandíbula se encontrarán muy sensibles al tacto. Es posible que el médico indique algún otro tipo de estudio.
Si las amígdalas no tienen dolor, no se necesitará tratamiento, si el paciente tiene estreptococos se le recetarán antibióticos y es importante dar término al tratamiento tal y como el médico lo indique.
Cuando el dolor la inflamación y el dolor de las amígdalas es muy frecuente es posible que se deban extirpar.
Se debe consultar al otorrinolaringólogo en caso de:
Las adenoides son dos glándulas muy parecidas a las amígdalas y están ubicadas en parte de atrás de la garganta. A diferencia de las amígdalas, estas no pueden ser vistas al abrir la boca ya que están encima del paladar.
La principal función de las adenoides es producir anticuerpos para el organismo. Son los aliados principales para combatir los microrganismos que invaden las cavidades nasal y bucal. Si se tienen que extirpar, no se perjudica el sistema inmunológico.
Las adenoides se desarrollan hasta la adolescencia y desaparecen en la edad adulta.
Los síntomas de las adenoides son:
Como el niño no concilia bien el sueño durante la noche, es posible que durante el día padezca de cansancio, sueño y esté molesto sin razón aparente.
Al respirar siempre por la boca, la anatomía facial de los niños se altera, el rostro se alarga, los dientes incisivos son grandes y agrupados, la nariz se eleva, el labio superior queda corto y el paladar se arquea y la mandíbula no está bien desarrollada.
Si el caso del padecimiento de las adenoides, es extremo, el niño tendrá dificultad para respirar, roncará mucho, frecuentemente padecerá dolor de oídos y esto podrá llevar al niño a largas ausencias escolares. En esta caso está indicada la adenoidectomía y frecuentemente esta cirugía se hace junto con la amigdalectomía, pero esto ya determinará el médico si es necesario.
Las expectativas después de la cirugía para los niños son:
Si usted sospecha que su hijo está padeciendo de adenoides, amígdalas inflamadas (anginas) o ambas consulte a su médico, en Mexicali el Dr. José J. Avelar otorrinolaringólogo, con gusto le atenderá a su niño, haga una cita hoy mismo al teléfono (686) 554-0469.